“La compactación y densificación no son el objetivo, el objetivo es crear una ciudad más compleja”, aseguró el arquitecto Álvaro Morales. Esa fue una de las primeras ideas que surgieron desde el grupo de arquitectos y urbanistas que se reunieron con Enrique Alfaro en la ex Fábrica de Chocolate.
En un acto inédito, un candidato a la Presidencia Municipal de Guadalajara se reunió durante la campaña con aquellos que deberían de ser los encargados de trazar el destino del patrimonio y de los nuevos referentes arquitectónicos de la ciudad, pero que hasta hoy han sido ignorados.
Concursos claros y transparentes que impidan casos como el del nuevo Mercado Corona que a decir de Alfaro es un ejemplo de cómo no se deben hacer las cosas. Asignaciones a arquitectos destacados de la ciudad, obra pública para los arquitectos no sólo para los constructores, una red de corredores verdes y un proyecto de visión a largo plazo, fueron peticiones emitida por la comunidad de urbanistas, mismas que fueron recogidas por Alfaro quien se comprometió a darles seguimiento una vez pasadas las elecciones desde la Presidencia Municipal.
“Queremos que los arquitectos pongan a prueba su talento, necesitamos pensar el nuevo esplendor de Guadalajara”, fueron las palabras de Enrique tras exponer el plan que forma parte del principio de Ciudad Digna, que incluye el rescate de las banquetas y espacios públicos, la propuesta de poner sobre la mesa el debate sobre los espectaculares que contaminan la ciudad y la creación de una plan de desarrollo de por lo menos 10 años para crecer con orden y dejar atrás la Guadalajara dispersa, desconectada y desigual en la que hoy viven los tapatíos.
“Queremos que los arquitectos pongan a prueba su talento, necesitamos pensar el nuevo esplendor de Guadalajara”
“Basta de intereses mezquinos, queremos un Presidente valiente que escuche y sea inteligente”, afirmó uno de los asistentes a la ex fábrica de chocolate, después de comentar que no es posible que el desarrollo de la ciudad se esté decidiendo desde el Tribunal de lo Administrativo del Estado de Jalisco, pues no se respetan los planes parciales y se impone el interés particular sobre el general.
“La Calzada unirá a Guadalajara, será un elemento de equidad, desarrollaremos 5 polígonos de integración urbana que dejarán de lado su rasgo de división entre los que más y menos tienen”, Enrique Alfaro además se comprometió, de ganar las elecciones, a exigir a la Federación respete al Gobierno Municipal, “estoy seguro que Ramiro Hernández desconoce el proyecto de la Línea Tres del Tren Ligero, por eso están sucediendo cosas que afectan a la ciudad, no vamos a permitir que sigan sin saber qué es lo que van a hacer”. El candidato aseguró que en otras ciudades gastan por tener sus líneas subterráneas, en Guadalajara por ahorrarse unos pesos harán una nueva cicatriz que la dividirá.
