Ganó la ciudad.

Las elecciones de 2015 las recordaremos por la participación histórica de los ciudadanos. En el proceso electoral de la segunda ciudad más grande del país se demostró, como dice el diario español El País, que se puede "fulminar el bipartidismo", no sólo en Guadalajara, sino en Jalisco. Enrique Alfaro, candidato de Movimiento Ciudadano a la Alcaldía de Guadalajara, es hasta el momento el virtual ganador de loc comicios con más del 50% de la votación a su favor.

En lo que resultó ser una jornada intermedia histórica, con bajo nivel porcentual de voto nulo y un alto porcentaje de participación, la razón era simple: los tapatíos tenían prisa por cambiar la realidad de su ciudad, poniéndole punto final a la era de los partidos tradicionales.

Desde temprano los ciudadanos libres salieron a votar, sin dejarse intimidar y estuvieron atentos ante la posibilidad de que surgiaren las viejas prácticas de los partidos de siempre, como la “compra de votos”. La jornada arrancó sin contratiempos y cerca del mediodía Alfaro acudió a ejercer su derecho cívico acompañado de su esposa y sus hijas. Los ciudadanos no pararon de expresar en las redes sociales su apoyo al “pelón” y a los demás candidatos de Movimiento Ciudadano en los municipios de la Zona Metropolitana. 

En un abrir y cerrar de ojos dieron las 6 de la tarde y se cerraron las casillas. Apenas inició el conteo y en cada una de las urnas se imponían las boletas donde sobresalía el águila cruzada; era un hecho, un triunfo arrasador e histórico de Enrique Alfaro, quien así refrendaba el dominio electoral que tuvo en 2012 en la Zona Metropolitana de Guadalajara.

De inmediato, miles de simpatizantes naranjas se congregaron en la Glorieta La Minerva, donde esperaban el arribo de Alfaro y otros candidatos, como Pablo Lemus, quien dio la sorpresa para arrasar por una differencia de dos dígitos sobre su contendiente más cercano.

Está más que claro, esta amplia diferencia representa el hartazgo de la sociedad que quiso renovarse desde ya y no esperó las elecciones presidenciales, pues sabe que el cambio se construye desde casa.

Tras dedicarle el triunfo a la ciudadanía, Alfaro reafirmó su compromiso de presidir la capital jalisciense, y tendió la mano al gobierno estatal.

“Este triunfo es de quienes no tenemos miedo, de quienes luchamos por lo que queremos, por los que no nos dejamos doblar. Miren el compromiso que tenemos, estamos ante los ojos de la segunda ciudad del país, vamos a construir un gobierno del que nos vamos a sentir orgullosos y eso es lo que vamos a hacer”, declaró el abanderado naranja.

Y no nada más fue Guadalajara, la ciudad que se pintó de naranja: de la mano de Pablo Lemus, Alberto Uribe y María Elena Limón, los habitantes de los municipios de la ciudad también expulsaron el PRI con un margen amplio, demostrando que coincidieron con el “Proyecto Metropolitano”.

“Ustedes son los que ganaron la elección, se los agradezco de corazón, uno no tiene palabras para expresar el agradecimiento, la confianza que nos han dado, aquí estamos quienes integramos este proyecto político, todos tendremos una gran responsabilidad por nuestra ciudad, el compromiso que hicimos en campaña, ahora sí que aplica la de ‘se los dije’”, agregó Alfaro.

Hoy sólo tengo algo que decir: No les vamos a fallar. Muchas gracias. pic.twitter.com/jPf8a3ujpL

— Enrique Alfaro (@EnriqueAlfaroR) junio 8, 2015

Además de ganar por tercera vez Tlajomulco y repetir en Puerto Vallarta, localidades como Tepatitlán, Ocotlán, Ciudad Guzmán (Zapotlán), Zapotlanejo, Juanacatlán y todos los distritos tapatíos estarán representados por este Movimiento que se ha expandido en todo Jalisco.  

Acompañado de Lemus y los candidatos a diputados, Enrique Alfaro aseguró que comenzará una nueva era en la metrópoli y fue despedido entre gritos y porras de “sí se pudo” y “no nos falles”.